dimecres, 3 de març del 2010

dE gEStos y éTicA dEsoRdeNada...




Una de las cosas que más rabia me da entre los millones de cosas que me dan rabia en la vida es encontrarme a gente conocida en esos días en que sólo me apetece alienarme en mi mundo, con la única compañía de mis desvaríos mentales y mi chute de música en los auriculares. Esta mañana me ha pasado en el metro. Iba yo muy cansado, súper dormido, y con necesidad de guitarras reconstituyentes. Y sentada en el andén he visto a una compañera de trabajo a la que conozco de vista, pero con la que no he intercambiado un diálogo en mi vida. Ella estaba despistada, y sentada justo a la altura del andén en que me pongo siempre, porqué salgo por allí. El metro llegaba justo en ese momento, así que he tenido la opción de montarme en otro vagón sin que me viera, o montarme en el mío de siempre, que era en el que se iba a subir ella. Tras un breve momento de duda, he decidido que no tenía por qué cambiar mis hábitos, y que además era muy ruin y cobarde hacerlo. Así que me he subido a mi vagón habitual, me he quedado de pie apoyado en una puerta, y estando ella sentada y todavía despistada, la he buscado con la mirada para que me viera, se diera cuenta que yo la había visto, y poder saludarla con un gesto de cabeza y una leve sonrisa. La educación no hay que perderla nunca, y me parece bastante cutre hacerse el sueco como si no hubieras visto a alguien cuando sabes perfectamente que está ahí. Ella creo que se ha quedado dudando al principio, y cuando su cabeza ha relacionado mi cara con el trabajo, entonces ha sonreído abiertamente. Como digo, a mí no me apetecía nada entablar la típica charla superficial de compromiso: no me gusta hacer las cosas porque toquen si no me apetecen, por las mañanas no suelo ser persona, y hoy estaba particularmente asocial, así que una vez saludados desde la distancia, ya no he hecho ningún gesto para acercarme o hablar con ella. Ella tampoco lo ha hecho, no sé si por vergüenza o porqué debía estar pensando lo mismo que yo, así que hemos compartido trayecto a unos pocos metros de distancia física, y a unos cuantos más a nivel espiritual.

Y admito que en el vagón me he planteado en si estaba siendo un rancio o un borde, o si ella estaría pensando eso de mí. Probablemente, porqué aunque me joda admitirlo, también estoy salpicado por los nauseabundos sentimientos de culpa tan usados por el cristianismo para domesticar a la gente bajo sus preceptos. Pero la verdad es que prefiero resultar transparente a ser hipócrita, y me importa bien poco lo que piensen de mí los demás. Y, reflexionando un poco, he llegado a la conclusión de que, bajo el prisma de esta sociedad que lo juzga todo menos lo propio (¿autocrítica? ¿Eso qué é lo que é?), yo hoy habría sido considerado, como poco, un delincuente egoísta sin moral ni respeto. Yo, sinceramente, creo que he sido honesto conmigo y con esa otra persona, porqué en este momento puntual y con el contexto que me rodeaba hoy, lo único que me apetecía era sumergirme en mi música. Quizás si me hubiera pasado mañana, y estando yo con otros biorritmos, me habría ido directo hacia ella pensando que era una buena oportunidad para conocerla, y habríamos hablado por los codos hasta el curro. Porqué no es un problema personal de mí hacia ella (si ni tan siquiera sé cómo es), sino una situación puntual mía, de mis adentros, que afecta a mi relación con el mundo exterior. Y tengo la sensación de que si nos educaran huyendo de 'valores' como la vanidad, la culpa o el orgullo, podríamos vivir situaciones de este tipo con mucha más naturalidad, y sin que provocaran malos rollos con uno mismo y con los demás.

Perdonadme el rollo, pero es que me fascina la mente humana y los mecanismos que la hacen funcionar con tanta variedad de registros... :P Ahora mismo, por ejemplo, me siento en el paraíso con esta maravilla de la que no me canso llamada Fanfarlo...




Y sé que soy un pesao con ellos y llevo más de un año dando el coñazo; pero como me hacen sentir tan maravillosamente bien, y no entiendo que podáis vivir ignorándoles, me apetece haceos un regalito sonoro. El dEsoRdeN tiene luces y sombras, ya véis...


EN EL NOMBRE DE BAUDELAIRE, HACEOS ESTE FAVOR...




8 comentaris:

X ha dit...

Y sin embargo aquí estás soltando el tochaco... ¿echarás también la culpa de ello al cristianismo? xD El sentimiento de culpa no tiene nada que ver con él, como dices la educación no hay que perderla nunca y cada uno la lleva hasta un límite... otro podría pensar que ese límite está más allá de saludarla con un gesto y que la educación obliga a hablar con ella aunque sea del tiempo, otro sin embargo pensará que no hacía falta ni el gesto del "te he visto y sé quién eres" salvo que se demuestre que hay contacto visual... a partir de ahí podemos buscar culpables, a veces a nosotros mismos, pero si de verdad no te importara lo que piensen los demás tal vez te habrías saltado lo de la educación e incluso escribir este post. xD Creo que a todos nos importa lo que piensen los demás. Si no... ¿qué estamos haciendo? :-)

:::::: ha dit...

Bueno, como siempre te digo, pienso que intentas ser o parecer más duro de lo que eres. No creo que tenga nada de malo sentir ese "remordimiento" por saludar o dejar de saludar, por charlar o dejar de hacerlo.

Es muy normal y es la esencia noble que tienes, aunque te resistas a ella, sí sabré yo que eres un chico sensible. Eso se nota, por ejemplo en que SIEMPRE contestas TODOS los comentarios en tu blog; revela que eres educado y gentil cuando lo deseas -y no es incorrecto- y que valoras que nosotras (tus chicas y uno que otro chico) te leamos con atención.

Y bueno, nos guste o no vivimos en una sociedad en la que siempre estamos decidiendo y actuando entre los correcto y lo incorrecto, lo bueno y lo malo.

Y cambiando a un tema más estupendo, tienes que saber que la carpeta comprimida que nos dejas está super pesada, tardé casi 15 minutos en descargarla, obviamente no sabía que era, sólo intuía que era música (así que ese click que hice puedes considerarlo una prueba de amor). Pero estoy feliz con el regalo.

Yo no soy indiferente a Fanfarlo, ni a otras canciones que nos dejas, eso ya lo sabes verdad?. Todo lo contrario, me encanta (http://el-abacabu.blogspot.com/2010/02/fanfarlo-drowning-men.html), así que me quedo feliz con el obsequio que nos dejas.

Mil gracias, mi querido Desorden, Fanfarlo también me reconforta y me provoca sensaciones placenteras

Muaaack


p.d. Que rollooooo!

moonlight ha dit...

ja m'imagino ella escribint la mateixa història però des del seu punt de vista, al seu blog, jejeje

ardilla ha dit...

Yo de esto también podría escribir un texto...además yo soy de las que tienden a hacerse la sueca si conozco a la persona solo de vista aunque coincidamos casi a diario en la misma estancia, porque para mi eso no es conocer a una persona...de hecho ayer un amigo de clase, me confesó que cuando coincidía conmigo el primer año en una clase y luego en el bus pensaba que era una estirada, lo que me hizo plantearme si es que soy una rancia o qué, porque a él le parecía mal que no saludase...en fin, que en estas situaciones sociales soy un poco un desastre,
y luego cuando intento ser sociable y maja se me ponen a leer el periódico mientras que vamos sentados juntos en el tren...:D

Sandra ha dit...

Posiblemente por la cabeza de la muchacha estuvieran pasando los mismo pensamientos que por la tuya, y es que querido mio ( que pitimini queda esta expresion :P )las personas humanas, al menos yo, por la mañana no atendemos ni a educaciones, ni cortesias, ni normas, ni explicaciones, ni ná!!!!.... las mañanas recien levantadas son mu malitas ;)

Sandra ha dit...

Ayy me pones tan nerviosa que se me ha olvidado besarte :):)

Muakkk

Nalda ha dit...

Yo también estoy harta de lo políticamente correcto. Me gusta la rebeldía sin remordimientos y me parece cojonudo que hayas sido honesto contigo mismo.

Muak

dEsoRdeN ha dit...

Me da la sensación que algunos no me habéis pillado el sentido del post en absoluto: todo lo que escribo en este blog lo hago única y exclusivamente PARA MÍ. Para vomitar mis neuras, dejar plasmados mis pensamientos, mis sensaciones, luego releerme, analizarme, entenderme mejor y, en definitiva, crecer. Justo por eso escribí este post. Por supuesto que me encantan y os agradezco un montón vuestros comentarios, porqué siempre es útil escuchar voces externas que me den más pistas sobre mi mismo que se me puedan escapar a mi, y complementen mi propia visión de las cosas. Ese es el valor añadido de un blog respecto a, por ejemplo, un diario personal en una libreta. Vosotros sois en gran parte los que mantenéis vivo este blog, y soy el primero al que le gusta abrirlo y ver que x personas me han dejado algún comentario. Pero eso no tiene nada que ver con lo que aquí decía.

Insisto: me la suda lo que piensen de mí los demás. Si de verdad me importara, habría ido rápidamente a hablar con esa chica aunque fuera de la cría del berberecho en cautividad, con tal de que luego no tuviera la oportunidad de pensar mal o echar pestes sobre mi. Pero me importa tres pitos. Y si me importara eso, tampoco lo habría escrito aquí para que la gente que lo lee me juzgue y se haga una idea más o menos acertada de mi. Pero me da igual. Cada uno es libre de pensar lo que quiera, y de la misma manera que a mi no me gusta toda la gente del planeta, también sé que yo no voy a gustarle a toda la gente. Es algo totalmente normal, humano, y eso no tiene por qué afectarnos, creo. Por eso decía lo de aceptarlo con más naturalidad, huyendo de orgullos y vanidades.

Y, por otra parte, ayer en el metro no tuve en ningún momento remordimientos. Simplemente me limité a reflexionar sobre la situación de manera fría, analítica, imaginando las conversaciones o pensamientos que se suelen dar (por lo que yo he vivido) tras situaciones de este tipo. Como decía X, lo de la educación y sus límites es algo muy personal, y por tanto admite multitud de interpretaciones más flexibles o más rígidas. Lo importante es ser fiel y coherente con tus propios parámetros.

Ah! Y no me jodas, X! El sentimiento de culpa fue, ha sido y será una de las grandes armas de persuasión que ha utilizado de manera perversa la iglesia para imponer (en muchos casos, con métodos criminales e inhumanos) sus doctrinas de ciencia ficción. Y si está tan arraigado todavía en nuestra sociedad en pleno siglo XXI (que tiene cojones) es precisamente por el peso que, lamentablemente, ha tenido el cristianismo en la educación. Y hablo del cristianismo porqué es lo que nos pilla más cerca, porqué todas las religiones que pregonen la existencia de divinidades sobrenaturales me parecen igual de abominables, además de un insulto a la inteligencia (si es que la inteligencia humana existe de verdad).

Y, por supuesto, que le den por culo a lo políticamente correcto, y viva la espontaneidad!

(no queríais rollo; pues toma dos tazas!)

Gracias de veras por interactuar con el dEsoRdeN. Me encanta la filosofía barata, e intercambiar puntos de vista

:D